If we have walked a good time in Barcelona we will realize that it is a kaleidoscopic city. While the old town runs through narrow and winding streets, when we reach the Eixample district we will walk in straight, parallel and perpendicular lines, through the grid designed by the architect Ildefons Cerdà, and in turn, these neighborhoods have nothing to do with the areas surrounding its hills, such as Turó de la Rovira or Turó de la Creueta del Coll, or with areas near the sea. One of the best ways to contemplate this beautiful mosaic is by moving away from the crowd and looking for a high point. In the city there are different places with spectacular views where you can see it from different perspectives. These are, for PicnicBCN, some of the best viewpoints in Barcelona,
Desde su restauración en 2010 y, sobre todo, desde que se rodó allí una tórrida escena de amor con la ciudad de fondo de la película "Tengo ganas de ti" con los actores españoles de moda, se disparó la popularidad de este lugar, hasta entonces una joya oculta de la que sólo disfrutaban los locales. El hecho de que esté en una zona poco turística y que la forma más directa de llegar sea en autobús (el V17) y caminando unos 5-10 minutos cuesta arriba (también se puede ir en metro en la línea 4 hasta la parada Alfons X pero hay que hacer más parte del camino a pie) ha contribuido durante mucho tiempo al desconocimiento del lugar. En él se encuentran los restos de una batería antiaérea antifranquista de la Guerra Civil Española y posterior escondrijo de la resistencia republicana, que permite disfrutar de una panorámica de 360º de la ciudad. Es por este motivo que está cada vez más concurrido y que hace las delicias de citas románticas, que PicnicBCN contribuye a hacer inolvidables encargándose de llevar el vino y una degustación de productos locales.
Antes o después de visitar el mundo de cuento de hadas que el arquitecto Antoni Gaudí proyectó en este espacio, merece la pena disfrutar de las vistas del barrio de Gràcia y de la Sagrada Familia que ofrece uno de los mejores miradores de Barcelona, en el mismo Park Güell. El acceso es fácil con escaleras mecánicas desde la estación de metro Vallcarca de la línea 3. La zona de picnic permite saborear un tentempié al aire libre, sin pagar la entrada del parque, con esta espléndida instantánea de la ciudad como telón de fondo. PicnicBCN reparte todos los días bajo pedido una deliciosa degustación de productos locales con el mejor maridaje en esta localización.
Disfruta de una experiencia inolvidable en el Park Güell saboreando productos gourmets locales con un buen vino mientras contemplas las vistas que ofrece uno de los mejores miradores de Barcelona. En PicnicBCN te lo llevamos con gastos de envío gratis.
El mirador llamado del Migdia es uno de los mejores miradores de Barcelona, y también uno de los más célebres, ya que regala a sus visitantes excelentes vistas panorámicas de 360º de la ciudad. Se llega en transporte público con el autobús 150 (Pl. España) bajándonos en la parada "Castell de Montjuic" o podemos aprovechar para coger el teleférico (desde donde evidentemente también obtendremos vistas espectaculares) también hasta la parada "Castell de Montjuic”. Esta visita enmarcarse dentro de una ruta muy recomendable al castillo de Montjuïc, que discurre por senderos que permiten ir en bici, correr, descansar o simplemente contemplar la naturaleza, incluyendo una zona de mesas y bancos al lado de un bar con vistas desde donde se pueden ver bonitas puestas de sol disfrutando de una bebida y un buen picnic.
El Tibidabo tiene doble interés: el mirador ubicado en la cima de la sierra de Collserola, a más de 500 metros de altura, y para los más atrevidos, el parque de atracciones del Tibidabo, donde podemos descubrir la ciudad de forma panorámica mientras damos la vuelta en el mítico avión, paseamos con el tren, descargamos adrenalina en la montaña rusa, subimos a la noria (desde donde podremos contemplar la ciudad desde todavía más arriba) y posteriormente podemos disfrutar de una deliciosa degustación de productos locales en familia.
Indicaciones desde el metro
La Torre Collserola, inaugurada para mejorar las comunicaciones en la época de los Juegos Olímpicos de Barcelona del 1992, tiene las perspectivas de la ciudad a mayor altura, en concreto a 560 metros sobre el nivel del mar. El edificio cuenta con un mirador panorámico acristalado al que se puede acceder en ascensor y disfrutar de unas vistas 360º de la ciudad. Puede llegarse hasta el pie de la torre desde la estación de ferrocarriles "Peu del Funicular".
En la periferia de la ciudad, en el antiguo barrio residencial de Horta, hay un pequeño tesoro que pasa desapercibido para muchos, entre otras cosas porque requiere ir en coche o haciendo una pequeña caminata de unos 20 minutos desde la parada de metro más cercana (Valldaura, de la línea 3). Se trata del Mirador de Horta, un lugar con preciosas vistas en el que alguien puso un columpio colgado de un árbol. Es un entorno ideal para citas románticas alejadas del bullicio y disfrutar del atardecer con un delicioso tentempié.
El parque de Collserola es una fuente inagotable de las mejores vistas de Barcelona. Una de ellas, podemos disfrutarla desde el Mirador dels Xiprers, un rincón mucho más desconocido que el famoso mirador de los Búnkers que ofrece unas vistas iguales o más bonitas. Si bien es cierto que requiere un paseo cuesta arriba por la Carretera de les Aigües, una vez arriba nos daremos cuenta de que ha valido la pena el esfuerzo. En los días claros el juego de luces es precioso, especialmente al salir el sol. Es ideal para una cita romántica o una excursión en familia. La parada de metro más cercana es la de Zona Universitària, de la línea 3.
Estás pensando en organizar un plan fuera de lo común en Barcelona? Elige uno de los miradores alejados del bullicio que te recomendamos y uno de nuestros menús degustación gourmet acompañados de un buen vino de la tierra y te lo traeremos al final de la visita para que lo saborees en buena compañía mientras te regalas las mejores vistas de la ciudad.
Si queremos conocer la Barcelona más popular y a la vez saborear unas deliciosas vistas desde uno de sus mejores miradores de Barcelona no debemos perdernos una bonita caminata desde el humilde barrio de Roquetes (parada de metro de Roquetes, línea 3) hasta el mirador de Torre Baró. Está situado cerca de un castillo construido a principios del siglo XX que iba a ser un hotel pero nunca se finalizó. Si nos queremos ahorrar la cuesta también podemos llegar en el autobús 82, que va desde Pl. Virrei Amat hasta el barrio de Torre Baró, en la otra ladera de la montaña, bajándonos en este mismo castillo. Además, si nos adentramos desde allí en el parque de Collserola en una de las numerosas rutas (caminando, corriendo o en bici) que se pueden llevar a cabo, no dejaremos de ver vistas a uno y otro lado de la montaña.
Muy cerca de los célebres Búnkers del Carmel, en el Parque del Guinardó, podemos encontrar vistas casi tan bonitas, con mucha menos afluencia de gente. Tanto en los caminos como en algunos de sus recodos encontraremos miradores como los de la Mitja Lluna o el mirador de Sant Joan en los que se ven preciosas panorámicas la ciudad de Barcelona (incluyendo la Sagrada Familia, la Torre Agbar, etc.) y sus alrededores. Encontraremos diferentes parques infantiles con juegos para que nuestros pequeños se diviertan. También hay zonas con mesas y bancos de madera y una fuente para refrescarse donde disfrutar de un tranquilo tentempié. Para acceder podemos ir en transporte público hasta la parada Guinardó - Hospital de Sant Pau, de la línea 4, y subir por los ascensores de la calle Telègraf, de manera que podemos ganar altura sin tener que caminar.
Los 140 metros de altura del Turó de la Peira, al noreste de la ciudad, en una zona lejos del bullicio turístico, ofrecen unas vistas privilegiadas tanto de Barcelona como de la montaña de Collserola. Puede llegarse fácilmente en metro, bajando en la parada de Vilapicina, de la línea 5. Este espacio es ideal para toda la familia, ya que alberga parques infantiles, un campo de fútbol, zonas de picnic y una red de caminos laberínticos para entretenerse haciendo una caminata hacia la cima, donde está el mirador.